Por: Javier “Sunshine
II” Sánchez
Mientras lees esta columna el festival
popular más grande del planeta esta terminando su primer semana de
celebraciones y yo estoy ahí. Uno de mis sueños como cervecero esta haciéndose
realidad: visitar el Oktoberfest original en Munich Alemania.
LUIS I DE BAVIERA |
Seguramente la próxima semana estaré
narrándole las experiencias recogidas durante estos días, así que hoy me
dedicaré a describirles qué es el Oktoberfest, esperando que con esto pueda
contagiarlos un poco de la alegría que representa.
Resulta
que un 12 de octubre de 1810 se casaron Luis y Teresa y organizaron un fiestón.
Estuvo tan buena la fiesta que ya lleva 203 años celebrándose. Cada vez llegan
nuevos invitados de todas partes del mundo, este año se esperan más de 7’000,000. Por supuesto estoy hablando del Oktoberfest,
el “Volkfest” o fiesta popular más importante, más grande y de mayor tradición
del mundo cervecero….y del no cervecero también.
TERESA de SACHSEN-HILBURGHAUSENH |
Los consortes evidentemente no eran unos hijos de vecino, sino nada
menos que el príncipe Luis de Baviera y la princesa Teresa de Sachsen-Hildburghausen. Años después Luis
se convertiría en el rey Luis I de Baviera quien pasó a la historia,
además de por el fiestón, por ser el responsable de la remodelación arquitectónica
más importantes que la ciudad de Münich haya experimentado jamás.
Como
cierre de las celebraciones de esta singular boda se organizó una carrera de
caballos en lo que entonces era una pradera ubicada frente a las puertas de la
ciudad. Esta carrera contó con la participación de la alta burguesía de Münich
y evidentemente asistieron los miembros de la familia real junto con los
recientemente desposados. En honor a la
novia dicha pradera fue bautizada con su nombre: “Theresien-Wiese”, que en
cristiano significa “La Pradera de Teresa”. Y es ahí donde año tras año se
llevan a acabo las celebraciones del Oktoberfest. La carrera de caballos sólo
organizó hasta 1938 y entonces el “uso de suelo” de la mencionada pradera
cambió hacia uno más mundano, como lo es el de tomar cerveza hasta que te salga
por las orejas.
Tengo
que comentarles dos cosas más. La primera es que el Oktoberfest en realidad
empieza en septiembre, específicamente el primer sábado después del 15 de
septiembre de cada año y se prolonga por dos semanas. Al grito de “O’zapft is”
que significa “ya está abierto” el alcalde de la ciudad destapa a martillazos
el primer barril, se disparan doce salvas de cañón desde las escaleras de la
estatua que representa Baviera y empieza a servirse la cerveza a más de 7
millones de almas sedientas que esperaron con ansia
ese momento. Los hoteles,
moteles, posadas, hostales y jonucos de 200 kilómetros a la redonda están
prácticamente llenos con huéspedes fantasmas que la mayoría de las veces
prefieren dormir en cualquier banca de un parque que tenerse que regresar hasta
el pueblo donde dejaron sus maletas.
EL ANTIGUO THERESIEN-WIESE |
La segunda cosa que tengo que comentarles es que en un principio no
había cerveza en la celebraciones anuales. La primer licencia para vender
comida y cerveza en le fue otorgada al señor Anton Gruber en el año de 1818,
desde entonces esto empezó a crecer de una forma impresionante hasta ser lo que
conocemos actualmente como Oktoberfest.
Otro detallito importante que deben ustedes saber, es el hecho de que
en el Oktoberfest solamente se sirve cerveza elaborada en la zona de Münich.
Las seis marcas presentes ( Spaten,
Augustiner, Paulaner, Hacker-Pschorr, Hofbräuhaus y Löwenbräu) venden entre
todas casi 7 millones de litros de cerveza durante el festejo, lo que
representa casi el 30% de su producción anual.
La
fiesta más importante del Estado de Baviera se transformo por méritos propios en la fiesta
más grande del mundo. Actualmente festivales homónimos en prácticamente todos
los rincones del planeta. Cada país en muchas de sus ciudades organizan eventos
que emulan la celebración cervecera por excelencia, como el caso de Mexicali,
donde El Sume celebra tan importante fiesta con barriles traídos directamente
de Munich. Los Oktoberfest no alemanes más grandes que se lleva a cabo hoy en
día son, los de Brasil (en Blumenau), Canadá (Kitchener), Estados Unidos
(Cincinnati) Argentina (Villa General Belgrano) y Chile (Malloco).
THERESIEN-WIESE ACTUALMENTE |
Seguramente en alguna parte de tu ciudad alguien estará celebrando este
próximo Oktoberfest. Busca ese lugar y únete a la fiesta, sobre todo si lograron
conseguir algún barril de una cerveza oficial de Munich, que ya de por sí probarlas
en botella resultan todo un acontecimiento.
Y tu…¿Qué cerveza nueva probaste esta
semana? Explora, diviértete, piérdete en la diversidad. Busca más allá de la tienda
de la esquina.
Paz para todos.
Comentarios: javier@elsume.com
Facebook: http://www.facebook.com/elsume