Por: Javier “Sunshine II” Sánchez
ARI Y HÉCTOR MATEOS MALHER |
Los cerveceros a veces se dan en
pares y este es uno de esos casos, y en este ocasión además son hermanos. Ari Tzontemoc y Héctor Itzcahuatzin Mateos Mahler,
el primero ingeniero agrónomo y el otro ingeniero mecánico; ambos artesanos
cerveceros.
Aunque
por años cada uno de este par de hermanos se desarrolla profesional y
geográficamente en entornos diferentes, eventualmente la vida los vuelve a
reunir utilizando esta vez el pretexto de la buena cerveza.
“A mi me gusta el vino” me dice Ari al
preguntarle sobre sus gustos. “a mi
– dice Héctor – no me gustaba
mucho la pisteada, siempre fui muy moderado y tomaba un poco de vino y un poco
de cerveza”. Nunca fueron particularmente afectos a la cerveza que
comúnmente se vende en las esquinas. Sin
embargo hace relativamente poco se toparon con estilos de cerveza que cambiaron
totalmente su perspectiva y fueron atraídos irremediablemente hacia ese
territorio para ellos hasta entonces desconocido. Ari se encontró primero con unas Sam Adams
que llamaron su atención, pero “la
primera campanada fuerte” se dio con una Arrogant Bastarden “en ese momento creo que en verdad me
enganché.” En otro momento, Héctor
se topó en una navidad con una Russian Imperial Stout que le abrió una nueva
dimensión de sabor, aroma y cuerpo, “ahí
sentí que me habían echado a perder el gusto por la cerveza industial”. Aunque
sus experiencias fueron impactantes para cada uno de ellos, ninguno de los dos
se imaginarios que un día estarían colaborando en fabricar su propia cerveza.
“Según yo – dice
Ari – el momento que está viviendo la
cerveza artesanal en Mexicali tiene sus raíces en San Diego, California, donde
se ha gestado todo un movimiento cervecero que ha impactado al mundo entero.
Por otro lado no podemos negar la influencia que ha tenido la cerveza Cucapá en
los nuevos cerveceros del país. En Mexicali El Sume participó de forma
importante porque ayudó a aglutinar a todos los que traíamos la cosquillita de
la cerveza. En los Cheve Tastings que
organizan muchos tuvimos la oportunidad de conocer aun más sobre el tema y creo
que contribuyeron para incrementar nuestro interés.”
“Yo veía como Ari – nos platica Héctor – andaba interesado en el tema, lo oía hablar
con entusiasmo sobre las cervezas que probaba y que eventualmente probé yo
también. Ya había yo investigado un poco sobre cómo hacer cerveza y un día le
propuse a mi hermano que nos pusiéramos a hacer nuestra propia cerveza, lo platicamos
y así fue como empezamos. Como muchos otros artesanos , empezamos con un
equipito que compramos en San Diego.”
¿En qué
momento deciden hacer cerveza no nomás para ustedes, sino para ofrecérsela a
otros? “Fue algo que sucedió sin darnos
cuenta. Nosotros simplemente estábamos disfrutando de algo que nos apasionaba,
queríamos hacer una cerveza buena, sabrosa que nos gustara a nosotros. Sin
embargo a nuestros amigos les gustó también lo que hacíamos y nos empezaron a
pedir. Poco a poco nos dimos cuenta de que podíamos hacer bachadas más grandes
manteniendo la calidad y que había más gente que quería probar lo que hacíamos.
Después empezamos a vender nuestra cerveza en El Sume y empezó a conocerse más
ampliamente.”
¿Piensan dedicarse de lleno a hacer cerveza o lo están haciendo por
moda o para pasar el rato? “Definitivamente
no lo estamos haciendo por moda porque es algo que verdaderamente nos apasiona,
pero aun no existen las condiciones para dedicarnos de lleno a esto. Si se dan
ciertas circunstancias favorables seguramente lo haremos, además hay que tomar
en cuenta que incluso a nivel legislativo y regulatorio las cosas no están
claras y en algunos casos es adversa, así que no sabemos si habrá las
facilidades para impulsar esta industria. Este movimiento es real y viene
fuerte, pero aun es pequeño comparado con la industria cervecera nacional. Su
futuro depende de cuál sea la disposición de nuestros gobernantes para
desarrollarla.”
UN PAR DE BARRILES LISTOS PARA ENTREGAR |
“En Mexicali estamos haciendo muy buena cerveza artesanal, aunque también
hemos probado unas muy sabrosas en Ensenada y Tijuana. Si nos comparamos con la
cerveza artesanal que se fabrica en el resto del país, estamos haciendo mejor
las cosas, tenemos un producto más innovador, con insumos de mucha calidad y
con talento.”
MiCheve
es una cerveza honesta y de buena calidad que ha sido bien recibida por los
consumidores y eso es lo más importante. Es un producto artesanal que habla muy
bien de Mexicali y que contribuye a incrementar la buena reputación que esta
industria local está ganando a nivel nacional.
¿Tu qué
cerveza nueva probaste esta semana? Explora, diviértete, piérdete en la diversidad.
Busca más allá de la tienda de la esquina. Paz para todos.
Comentarios: javier@elsume.com
Hola Javier,
ResponderEliminarYo estaba en esa ocasión que el Itzca tuvo su epifanía cervecera. Fué con una Yeti de Great Divide y de ahí en adelante ya nada fué igual.
Salud!!!...os
Miguel Fimbres
Los Sesionistas
Amigos de la Vid
Saludos Ari!
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