Por: Javier Sánchez Valenzuela "El Cerveciáfilo"
La Sidra y la Cerveza han caminado el camino juntos. Incluso el Beer Judgement Certification Program, o BJCP como se le nombra comunmente, en su edición de “Styles Guideline” o su Guía de Estilos, incluye a la Sidra
dentro de sus descripciones, al igual que a otra bebida tradicional inglesa conocida como Mead o Vino de Miel que en México es conocida como Aguamiel.
Las razones en un principio pueden no resultar muy evidentes para algunos, pero
basta con decir que ambas bebidas –aunque efectivamente ninguna de las dos es
cerveza – histórica y técnicamente han estado muy ligadas por siglos. Vamos por
partes y platiquemos de una y de otra con un poco más de detalle:
La
Sidra es también una bebida fermentada, solamente que los azúcares en lugar de
provenir de la malta, provienen de la manzana. Al igual que la Cerveza, la
levadura es agregada durante determinada etapa de su proceso de fabricación y
después es guardada en recipientes cerrados para su fermentación. La calidad de la Sidra resultante depende de
varios factores, como el tipo de manzanas utilizadas, el tipo de bacterias que están presentes o cuáles endulzantes (como miel
por ejemplo) y aditivos son utilizados en el proceso. Al igual que en la
cerveza, el agua constituye un elemento
fundamental que determinan su sabor y
calidad finales. Algunos fabricantes
utilizan levadura de Champaña o ácido tánico para acentuar el carácter y
agregarle un poco de acidez.
DIFERENTES ESTILOS DE SIDRA |
El proceso de
fermentación de la Sidra puede llevar desde semanas hasta meses. El filtrado
también es decisión del fabricante. Finalmente al embotellarse se puede agregar
algo más de endulzante para que siga fermentándose una vez cerrado el
recipiente. El tipo de Sidra más fuerte es el conocido como Applejack, que
concentra su contenido de alcohol congelando el líquido y abstrayéndole el agua
congelada.
BOTELLAS DE MEAD |
El Mead o
Aguamiel, por otro lado, es también un fermentado con agua pero en esta bebida
el ingrediente a fermentar es miel de abeja en lugar de manzanas o malta. En algunos estilos se le agregan otros
ingredientes como frutas, especias o granos e incluso se le puede agregar algo
de lúpulo, lo que le dá un sabor muy especial que en alguna medida nos recuerda
algunos estilos de cerveza como ciertas lámbicas o saissones endulzadas. El Mead o
Aguamiel es una bebida milenaria que algunos estudiosos ubican desde 7 mil años
antes de Cristo.
El
Mead generalmente tiene un contenido de alcohol que empieza en un 8% APV y alcanza más del 20% en algunos casos, de manera que hay que
tomarlo con cuidado.
Esta bebida empieza a tener cierta repercusión entre el mundo cervecero y es muy apreciada entre los bebedores de cerveza artesanal. Ultimamente incluso se empieza a importar a México la marca de Sidra Strongbow Hard Sider a través de otrora mexicana Cervecería Cuauhtémoc-Moctezuma.
Esta bebida empieza a tener cierta repercusión entre el mundo cervecero y es muy apreciada entre los bebedores de cerveza artesanal. Ultimamente incluso se empieza a importar a México la marca de Sidra Strongbow Hard Sider a través de otrora mexicana Cervecería Cuauhtémoc-Moctezuma.
Tanto las
sidras fuertes como el Mead son fáciles de encontrar en las tiendas especializadas
donde se vende BUENA cerveza, las encontrarás seguramente en la sección de cervezas
internacionales. Algunas veces las revuelven con los vinos, así que búscale por ahí también.
¿Tu probaste alguna cerveza nueva esta semana? Explora, diviértete, piérdete en la diversidad. Busca más allá de la
tienda de la esquina.
Paz y trabajo digno para todos.